FOPEA manifiesta su preocupación por la reiteración de prácticas periodísticas reñidas con los principios éticos irrenunciables de la profesión.
Ejemplo de ello es el trato discriminatorio y ofensivo brindado por una movilera del programa “Bien de Mañana” que conduce Fabián Doman por El Trece TV.
En una salida desde un subte, la cronista trató con tono de burla a dos personas pertenecientes a pueblos originarios, y cuando la mujer entrevistada se lo reprochó, fue el propio Doman quien reaccionó en forma errada al señalar: “Tampoco que me dé clases de moral… Me banqué bastante que el señor te trate un poco mal al principio. Ya que la señora también te trate mal, no. Dos no».
El Código de Ética de FOPEA señala en su articulado: “El periodista sólo podría mencionar cuestiones de religión, etnia, nacionalidad, orientación sexual, discapacidades físicas o psíquicas, etc., si ello fuera indispensable para comprender la información y dicha referencia no resultara ofensiva ni discriminatoria”. Y que “los periodistas deben ejercer su profesión respetando y fomentando la diversidad, evitando reproducir prejuicios, generalizaciones, estereotipos, estigmatizaciones u observaciones provocativas de cualquier índole respecto de grupos minoritarios y colectivos vulnerables”.
FOPEA advierte también la reiteración de prácticas referidas a la reproducción de contenidos sin citar la fuente de información, el abuso del tono confrontativo en entrevistas y paneles y la ausencia de interés por reflejar posturas diferentes a las del propio periodista en temas ligados a la política o los hechos cotidianos.
FOPEA llama la atención sobre estas prácticas reñidas con el pluralismo, el respeto a las personas, la ética y la calidad profesional, y convoca a los colegas a adoptar criterios amigables con los mejores estándares que enorgullecen al periodismo como actividad indispensable para el buen funcionamiento de una sociedad democrática y plural.