Entre las víctimas hay dos adultos mayores y una menor de edad. La principal hipótesis apunta a un homicidio seguido de suicidio.

Una tragedia conmociona al barrio de Villa Crespo en la Ciudad de Buenos Aires. Este miércoles por la mañana, cuatro personas fueron encontradas muertas en un departamento ubicado en la calle Aguirre al 1100, y la justicia investiga si se trató de un crimen intrafamiliar.

Los investigadores corroboraron que los ingresos no estaban forzados y hay indicios sobre un triple crimen seguido de suicidio que lo completaban un cuchillo ensangrentado, una carta en la cocina y un tratamiento psiquiátrico de una de las víctimas.

Con el análisis de los forenses, se estima que la madre mató a su esposo y sus hijos y se suicidó. Todas las víctimas habían muerto por heridas de arma blanca y en el cuarto donde estaba el cuerpo del padre de familia hallaron el cuchillo.

Las víctimas fueron identificadas como Adrián Seltzer, de 53 años; su esposa, Laura Fernanda Leguizamón, de 51; y sus hijos Ian, de 15, e Ivo, de 12. El hallazgo se produjo luego de que allegados a la familia alertaran a la Policía al no recibir respuestas desde la vivienda, incluso, se encontró una carta en la cocina.

“El cuerpo del hombre estaba en uno de los cuartos del departamento y, en esa misma habitación, también hallaron los peritos el cuchillo. Todos murieron por heridas de arma blanca”, comentaron fuentes cercanas a la investigación.

Ese dato, junto con el hecho de que la puerta estaba cerrada con llave y no presentaba signos de violencia y la carta hallada en la cocina, llevó a los investigadores de la División Homicidios porteña a pensar que no se trató de un hecho de inseguridad.

Fuentes judiciales confirmaron que la principal hipótesis apunta a un triple homicidio seguido de suicidio, aunque no se descartan otras líneas investigativas.

Los cuerpos ya fueron trasladados a la morgue para realizar las autopsias correspondientes. En tanto, los vecinos del edificio se mostraron consternados por lo ocurrido, asegurando que se trataba de una familia “muy reservada y tranquila”. La investigación continúa en curso.

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